jueves, 29 de agosto de 2013

El viaje de egresados (Martín Macchiavello).

Eran épocas de sube y baja. En todo sentido. Había que vivir la buena a pleno porque nunca se sabía cuándo todo podría acabar… En fin, en aquel agosto de 1992, Lanús reaparecía en Primera vía Russo por segunda vez (casi consecutiva) y hacía su presentación en cancha de Racing. No dejaba de ser un grande y en Avellaneda. Y mi llegada al Cilindro, contrarreloj: el regreso desde el viaje de egresados se hizo con la lengua afuera. No se podía decir ausente en la segunda bandeja del Presidente Perón. ¿Bariloche? Lindo, pero no tanto como volver a ver al Grana en Primera. Quién sabe si entre Cerebro, Grisú, Centro Cívico y el Cerro Catedral, no me habré cruzado con un nenito flaco y alto, dando sus primeros pasos, con un tal Carlitos Izquierdoz, quien por entonces no llegaba a los cuatro años y despuntaba el vicio de la pelota en la escuelita. Para una generación postergada, jugar contra Racing, se hizo algo especial. Cuestión de vecindad, cuestión de revancha post Misic 84, cuestión de peso. Lo cierto es que desde aquel 1-1 mentado hace 21 años, es decir, de nuestra definitiva vuelta a la A para nunca más volver, el mano a mano con la Academia nos resultó por demás ventajoso: los doblamos en triunfos (20 a 11, con 13 empates) y, hoy por hoy, llevamos contra ellos siete juegos sin derrotas, racha que creció en las últimas horas y que puede aumentar el 7 de septiembre, por la 6° fecha del Inicial. La Sudamericana fue caldo de cultivo para estirar la paternidad de tiempo presente y para pensar que, cuando se quiere, se puede.
Esta serie comenzó a definirse en Avellaneda, y sin brillar. Para nada. En siete minutos, entre Melano y Romero hicieron todo, aunque en el medio, Izquierdoz metió un tiro en el palo y Goltz otro en el travesaño. Lo ganaron los de arriba, la forzaron los de abajo. Pero en la revancha, la taba se dio vuelta. La versión exhibida poco tuvo que ver con las pantomimas del torneo local: Acosta y Silva fueron los primeros defensores gracias a su pressing galopante, aunque sin la dosis de locura de los pibitos de Racing, a quienes hicieron creer que se podían llevar al mundo por delante; los volantes fueron criteriosos y la entregaron redonda, sin altas dosis de pases al pie rival (grandísimo avance), extrañándose aún la presencia de un enganche digno, que desee entrar en juego y ganarse el pan (y una camiseta titular); y los centrales volvieron a ser el alma de un equipo que necesitaba corazón. Goltz, capitán, casi mete un golazo de chilena y el Cali Izquierdoz, a falta de uno, les metió dos. Bah, les metió cuatro ya. Los tiene de hijo… Todavía no brilla este Lanús, aunque tenga con qué. Con suerte, si se encuentra algún destello perdido por ahí. Pero le faltan horas de franela para que reluzca. Lo que hay, por el momento, le sirve para pretender mucho más a nivel interno y disfrutar el ‘cara o ceca’ de la Conmebol, que dicho sea de paso, le queda cómodo: en Sudamericana, en cinco series contra equipos argentos, superó cuatro (y en la que quedó out, ante Godoy Cruz, no perdió…). Sin embargo, ahora empieza otro cuentito. Otra Copa. Habrá que salir del país y poner el pecho. La última vez, hace poquito, en 2012, Río no nos hizo gracia. Y con un plantelazo. Será hora de demostrar que este grupo es cosa seria y no un montón de humo. Que la madurez está a la vuelta de la esquina con banderas como Izquierdoz, que dejó su Bariloche a los seis años, se comió todas las Inferiores, un préstamo a la B Metro (Atlanta) para foguearse, y ahora es el chico de la tapa. Vamos Lanús, América nos espera. Es tiempo de salir, de sellar el pasaporte, de pelear por un nuevo y gran objetivo. De crecer. De egresar. Ahora el viaje hacia la gloria es de ustedes. Nos saludaremos por la ventanilla. Ocho partidos, ocho escalas. Un título.

Lanús y un gran triunfo para meterse en los Octavos de Final de la Copa Sudamericana 2013.

El viejo y querido Club Atlético Lanús escribió otra linda página en su casi centenaria historia. Una página que nos enfrentó en un mano a mano con Racing Club de Avellaneda, un equipo que siempre será complicado por su historia, pero que de un tiempo a esta parte no la pasa bien con la Granate enfrente. Ayer, en los segundos 90 minutos de la llave, volvimos a ganar, esta vez mucho mas claro que en Avellaneda, con un segundo tiempo en el que el equipo fue muy superior, y en el que la diferencia pudo ser aún mayor en el resultado. Fue dos a cero, con dos goles de Carlos Izquierdoz, y fue cuatro a uno en el global, para acceder a los Octavos de Final de la Copa Sudamericana, donde enfrentaremos al ganador de Independiente Del Valle y Universidad de Chile que juegan hoy. Fue un buen partido de Lanús, casi sin pasar sobresaltos, y que, con el partido a su favor, mostró mucho de lo que se le estaba pidiendo: buen control de pelota, lograr tener varias opciones de pase, y en la segunda mitad muchas llegadas. Agustín y los cuatro del fondo (la muralla) muy bien, como siempre. En la mitad es muy bueno la presencia de Leandro Somoza, que en dos partidos demostró su categoría. El Pulpo también fue un punto alto en el medio Granate, con mucha lucha y con juego también. Saja le quitó la posibilidad de un golazo, luego de un hermoso zapatazo desde afuera del área. Anduvieron flojos el Paragua y Pochi y muy bien los dos delanteros. El Tanque, con su sacrificio y lucha, sumado a varias acciones inteligentes, y el Laucha redondeando un gran partido, fue figura del equipo y se retiró ovacionado. El equipo tiene el crédito abierto. Tenemos mucha fe en lo que viene. Mientras tanto seguimos disfrutando de otra alegría Granate.
Síntesis: Lanús 2 - Racing 0. Lanús: 1-Agustín Marchesín, 4-Carlos Araujo, 2-Paolo Goltz (c), 24-Carlos Izquierdoz y 6-Maximiliano Velázquez, 5-Diego González, 15-Leandro Somoza, 16-Víctor Ayala y 19-Cristian Chávez, 7-Lautaro Acosta y 9-Santiago Silva. Suplentes: 12-Esteban Andrada, 3-Luciano Balbi, 23-Nicolás Pasquini, y 20-Silvio Romero. DT:Guillermo Barros Schelotto. Goles: 33’PT y 25’ST, Carlos Izquierdoz. Cambios: 14’ST, 8-Fernando Barrientos por Cristian Chávez, 37’ST, 26-Lucas Melano por Lautaro Acosta y 41’ST, Ismael Blanco por Leandro Somoza. Amonestados: 16’ST, Diego González y 24’ST, Santiago Silva. Racing: Saja (c), Gómez, Ortiz, Cahais, Corvalán, De Paul, Pelletieri, Zuculini, Regueiro, Vietto y Martínez. Suplentes: Ibáñez, Migliónico, Battaglia y Hauche. DT: Fabio Radaelli. Cambios: ST 0’ Villar por Corvalán, 12’ Centurión por De Paul y Viola por Regueiro. Amonestados: 18’ Corvalán, ST 24’ Zuculini, 29’ Centurión, 30’ Villar y 31’ Pelletieri. Expulsados: ST 29’ Centurión y 39’ Zuculini. Árbitro: Patricio Loustau. Fecha: miércoles 28 de agosto de 2013.