jueves, 16 de julio de 2009

Sebastián Marcelo Blanco, ex Blanquito,


"En el Torneo anterior, el que cometía menos errores en la recta final, iba a ser el campeón. Lanús perdió muchos partidos, y ahí estuvo la clave. Si bien cuando no podes ganar es bueno no perder, muchas veces la desesperación por ir a ganar nos jugó en contra. No hemos estado finos en la pelota parada, a la hora defender, y hablo de todo el equipo, no solo de la defensa, y creo que eso lo pagamos caro. Somos un equipo que por ahí se hizo muy largo, y que los demás ya nos conocen".

"Da bronca no haber logrado nada, pero esa bronca y calentura hay que hacerla que forme parte del pasado porque se vienen muchas cosas de acá en adelante. Nos tiene que ayudar a crecer como jugadores y como grupo. Hay que tomarlo como algo positivo, porque, en otra época, esta campaña hubiese sido perfecta sin haber conseguido el título. Y hoy se habla de lamento porque se perdió un título. Mira hasta donde llegamos. Estamos hablando que Lanús es candidato cada campeonato, que está obligado a pelearlo y ganarlo. Bueno, eso lo logramos nosotros y tenemos que hacernos cargo".

"Como equipo somos muy competitivos. Luis siempre nos recalca que quiere un equipo competitivo, y nos agradece al término de cada torneo por seguir siéndolo. Nadie puede discutir eso, que somos un equipo de esa característica. Siempre peleamos hasta el final, como en estos dos torneos. Y eso habla muy bien de nosotros. Ahora hay que seguir por este mismo camino y peleando bien arriba. Consiguiendo buenos resultados, grandes campañas como terminar segundos, ganando títulos, jugando Copas. No tenemos nada que envidiarle a nadie. Nos merecemos estar donde estamos".

"La verdad trato de no pensar en mi futuro. No hay nada concreto por mí. Pero si ya hable con los dirigentes que en el caso que llegue algo bueno para las dos partes me dejen ir. La verdad no estoy desesperado. Si llega la oferta armo el bolso y me voy. Triste y contento. Y si me quedo seguiré orgulloso de seguir formando parte de este club. No me desespera. Pero si quiero darme el gusto de poder jugar afuera. Yo a mi edad no tengo la necesidad de decir "agarro lo primero que venga". La idea es jugar porque me encanta hacer esto. Y si me voy, tengo que ir a un equipo donde esté más cómodo que en Lanús. Es difícil. Pero me gustaría estar en un lugar donde tenga cosas que demostrar y conseguir seguir creciendo como futbolista. No me gustaría alejarme de lo que es el fútbol grande. No quiero estar lejos de la Selección. Y si te vas a cualquier lado desapareces, jugas por la plata".

"El golpe en el tobillo influyó mucho. Perdí físicamente, no me sentía seguro. El esguince que tuve era para yeso, porque duraba más de un mes. Sin embargo, a las tres semanas ya estaba jugando de nuevo. Es una desesperación común que le pasa a cualquiera, pero que por ahí uno tiene que ser un poco más inteligente. Hasta hubo partidos que tuve que jugar infiltrado. Eso influye muchísimo, pero son cosas que de afuera no se ven el dolor con el que juega un jugador. No lo digo para dar lástima ni mucho menos. El que decide entrar a una cancha es uno mismo. Hoy ya estoy bien. Sigo con algunas molestias, pero ya no sufro más. Arranco la pretemporada desde cero y no hay más tiempo para las excusas".

"El técnico me dijo en más de una oportunidad que me veía como capitán, a pesar de mi corta edad. Si me toca bien, y sino seguiré siendo el mismo, alentando al equipo de la misma manera. No hace falta tener una cinta para eso. El que sea el capitán va a ser una parte muy importante en el grupo porque es el encargado de pelear todos los intereses dentro del equipo. Hay varios referentes acá, como Jadson, Velázquez, Hoyos, Pepe, pero si me toca a mí estaré encantado".

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